Qué desayunar antes de ejercitar

Qué desayunar antes de ejercitar

Si se tiene la costumbre de que la hora de entrenamiento es en la tarde o en la noche, la comida no tiende  a ser un problema mayor. Al ejercitarse en estos momentos del día, generalmente ya se ha digerido el almuerzo o cena, respectivamente, y un snack antes de entrenar solucionaría el problema de las energías.

Sin embargo, cuando se trata de entrenar en horas de la mañana la cosa se complica un poco más. Primero, surge la duda de es mejor hacerlo en ayunas o no. Segundo, si se opta por desayunar, en la mayoría de las ocasiones no se dispone de tiempo suficiente para hacer luego la digestión adecuadamente: muchos entrenan a primeras horas de la mañana (6 o 7am) porque luego tienen que ir al trabajo o a clases. Para darle solución a todas las dudas que deben dar vueltas en su cabeza, planteamos tres caminos a seguir en estos casos, indicando cuáles son losalimentos que se adaptan a cada situación.

Entrenar en ayunas: muchos estudios indican que se quema más grasa corporal si se realiza ejercicio en ayunas. Sin embargo, a algunas personas no les sienta bien y mientras entrenan son víctimas de mareos o desfallecimientos. Aun cuando el organismo aguante, en estos casos es aconsejable consumir una buena cena que contenga carbohidratos de absorción lenta, como los cereales o panes integrales, las legumbres y las verduras, con la finalidad de almacenar energías para la rutina matutina.

Entrenar después de un mini-desayuno: esta es la opción perfecta para aquellos que no disponen de mucho tiempo en la mañana, pero tampoco resisten la rutina de ejercicios en ayunas. Una rebanada de pan tostado con un vaso de jugo, un huevo, yogurt o frutas, como un cambur o una manzana, son alimentos ideales que aportarán al organismo las energías necesarias y se digerirán rápidamente. Las bebidas energéticas también son una buena opción, ya que el organismo digiere más fácilmente los líquidos.

Lógicamente las cantidades hay que cuidarlas e, igualmente, es recomendable esperar al menos 45 minutos antes de entrenar. Una buena idea es dejar todo listo desde el día anterior y comer inmediatamente después de levantarse, para realizar la digestión mientras realiza los preparativos para entrenar.

       

Entrenar después de un desayuno completo: en este caso, a la primera comida del día no le puede faltar cereales, leche o huevos y jugos de fruta o la fruta completa. Hay que disponer de tiempo suficiente, ya que la digestión de todos estos alimentos juntos será mucho más lenta, por lo cual se deberá esperar unas 2 o 3 horas para comenzar a ejercitarse.

En cualquiera de los casos, comer un snack, por ejemplo media barra energética o un trozo de fruta, unos 15 o 20 minutos antes de comenzar la rutina es ventajoso para garantizar la resistencia. Por último, lo más importante de todo esto es que pruebe con cuál de las tres opciones se siente más cómodo mientras realiza la rutina, ya que cada organismo demanda sus propias condiciones.