3. Té y chocolate: Para el chocolate oscuro, los tés más fuertes son los capaces de seguirle el paso, un Earl Grey o un oolong son buena compañía. Para chocolate con leche o blanco, se vale algo más delicado como un rico Irish Breakfast o un Lady Grey.
5. Pan y galletas: El té negro es el mejor amigo del pan tostado, probar una rebanada con un poco de mantequilla o mermelada y un sorbo de Earl Grey o Prince of Wales es una delicia. Por otra parte, als galletas también acompañan bien los blends de té negro, además del chai, en ambos casos, el té acompañado de un poco de leche lo convierte en la mejor compañía.
5. Postres y dulces: Aquí es donde el té brilla con más esplendor, al armonizar su punto amargo y aromático con platillos dulces, el resultado es maravilloso. El té verde puede acompañar tortas de zanahoria o dulces a base de pistachos, además, va bien con un cheesecake, pues su astringencia limpia el paladar de la textura cremosa y cada bocado se disfruta como el primero. Los postres cítricos van genial con té negro, al igual que los postres de vainilla. Postres con frutas dulces como cambur o melocotón armonizan con oolong, mientras que postres de almendras o nueces pueden ir con un chai, para que las especias complementen el gusto de los frutos secos.